Termine con gran satisfacción el manga de Battle Royale devorando los últimos cuatro tomos como un poseso a sabiendas de que la adaptación cinematográfica ya me había destripado el final, sin embargo el saberlo me produjo mucha más emoción pues quería ver como Koushun Takami cerraba esta adaptación de su novela original, para mi sorpresa no solo logro cerrarla de la mejor manera posible si no que supero todas mis expectativas con un final mucho más crudo y violento que el que había visto en la película dirigida por Kinji Fukasaku, todo esto se debe en gran parte al ilustrador Masayuki Taguchi, un dibujante que desconocía antes de leer esta obra y que se ha ganado todo mi respeto gracias a lo bestia de su dibujo que puede pasar del preciosismo absoluto a terribles baños de sangre en unas cuantas viñetas. Serán estas escenas en las que Taguchi parece regodearse con la naturaleza violenta de los personajes las que sacan la mejor expresión de su trabajo regalando momentos que te hacen contener el aliento observado impávido como la furia de una historia como Battle Royale se desata en los lápices de Taguchi, un artista al que sin duda seguiré la pista, porque bestias como él no se encuentran todos los días.
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