Richard Matheson escribió en 1954 I Am Legend una de las obras cumbres de la ciencia ficción en la que nos relata el día a día de Robert Neville, ultimo humano sobre la tierra que ahora es dominada por vampiros que son el resultado de un extraño virus que afecto a toda la población mundial. Es esta condición de último humano la que lleva la carga dramática del libro en la que la condición humana es llevada hasta sus límites con un protagonista que se presenta como un héroe melancólico y pesimista que de día busca exterminar la mayor cantidad de vampiros posible a la vez que intenta encontrar una cura para el virus y que en las noches es acosado en su hogar por cientos de vampiros que intentan acabar con la amenaza que representa su existencia, en una obra en la que Matheson logra crear un clima de desesperación pocas veces visto el cual alcanza su máxima expresión en el clímax final que es por mucho uno de los finales más devastadores de la literatura universal.
Por supuesto una historia como estas no paso desapercibida para los ojos de varios cineastas que intentaron llevar a la gran pantalla la historia de Matheson y aunque los resultados fueron irregulares, su visión del universo de I Am Legend permanece en la piel de tres hombres que con mayor o menor acierto tomaron como suya la batalla de Robert Neville.
Vincent Price fue el primero en caracterizar a Neville en The Last Man on Earth (1964) quizás la película más fiel a la obra original en la que Price retoma esa aura melancólica y pesimista que caracterizaba al personaje de Matheson pero sin llegar a impresionar, es más se nota que Price no esta cómodo con el papel, sin embargo la película no desentona en general y se disfruta tanto si se conoce el material original como si no se tiene idea de libro.
Charlton Heston continuaría con la tradición en Omega Man (1971) una película construida para el lucimiento de Heston con la escusa de llevar a la pantalla la obra de Matheson que me produce sentimientos encontrados, por una parte no puedo negar que es una película correcta con una estética repleta de guiños a la cultura popular de la época que termina por atraparme, pero por otro lado la forma como destriparon el material original no tiene nombre y Heston tampoco está muy a tono con lo que representa Robert Neville, a decir verdad parece más un héroe de acción que otra cosa, pese a esto la película aguanta bien el paso de los años (caso contrario ocurre con la película de Price) y aunque sus fallos son casi imperdonables, estoy seguro que puede animar a cualquiera una tarde de domingo.
Finalmente será Will Smith el encargado de retomar lo hecho por Price y Heston en I Am Legend (2007) película que como entretenimiento funciona pero como adaptación apesta, de nada valieron los millones que invirtieron en la producción para presentarnos un mundo desolado (uno de los pocos aciertos del filme) cuando este no es aprovechado como es debido en una película que se disfruta a medias, quizás la trate muy duramente pero es que le tenia fe, al final todo los buenos augurios se fueron al traste cuando trataron de edulcorar una historia que se caracteriza por el pesimismo al cambiarla por una historia esperanzadora que no tiene pies ni cabeza dentro del universo de Matheson. A rescatar la actuación de Smith que si bien no logra cuajar del todo como Robert Neville, si siento que al menos logro acercarse al espíritu del material original.
Bonus Stage: Mark Dacascos en la apócrifa adaptación de la obra de Matheson llamada I Am Omega (2007) producida por la gente de The Asylum como exploitation de la película de Smith.
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