Uno de los más queridos juegos por aquellos que disfrutamos del buen “vicio” a principio de los noventa es el mítico Sunset Riders, videojuego creado por Konami en el año de 1992 en su versión arcade y que un año más tarde dio el salto a las consolas Sega Mega Drive y Super Nintendo en esta última es donde pude disfrutar de incontables horas de diversión gracias a Steve, Billy, Bob y Cormano, cuatro caza recompensas que se encargarán de atrapar a los villanos más peligrosos del salvaje oeste.
El modo de juego es un clásico “run and gun” en el que básicamente debes correr y disparar casi desenfrenadamente, esta forma de juego implica que la elección de personaje con el que vas a jugar sea de vital importancia, Steve y Billy usan revólveres aunque necesitan de mayor cantidad de disparos para derrotar al enemigo, Bob usa un rifle y Cormano una escopeta, ambos cuentan con una mayor potencia de disparo, pero son un poco más lentos, yo particularmente siento una debilidad por el revolucionario mexicano Cormano quien siempre me pareció la elección más lógica al no tener una gran puntería, además su sombrero y su poncho lo dotaban de un carácter singular frente a los típicos cowboys con los que compartía aventuras.
Pero quizás lo que más se perpetuo del juego son sus enemigos cargados de una fuerte iconografía pulp, cada uno con características especiales que hacían mucho más entretenido el derrotar a los “jefes finales” de cada escenario. Recuerdo particularmente dos de estos villanos el Jefe Wigwan, un indio con pies de resorte que saltaba por toda la pantalla lanzando cuchillos a diestra y siniestra que me hacia la vida imposible -para mi es por mucho el más duro rival del juego- y The Smith Brothers dos forajidos con una cantidad ilimitada de bombas incendiarias que tenían su base de operaciones en una taberna, siendo este mi escenario favorito de todo el juego, especialmente por el premio que te llevas al derrotar a los enemigos, un baile de tres lindas señoritas pixeladas.
Sunset Riders sin duda marco una época: su estética, su música, su jugabilidad y su dificultad nos pegaban por horas a la pantalla sin soltar el control con el cual nos enfrentábamos en cruentas batallas por extraños y peligrosos lugares en pos de obtener las recompensas por capturar a los criminales más buscados del oeste en una aventura sin par que recuerdo con un cariño especial.
genial vídeo de un "vicioso" derrotando al jefe final
4 comentarios:
Entrañable juego!.... también gasté variadas horas jugándolo!... Un saludo ome Data!
Entrañable, esa es la mejor definición para este juego , saludos
Uno de los grandes arcades de Konami que tuvo ssus buenos port a Megadrive y Supernes (siendo el primero, el de la consola de Sega, un poco màs querible que el de Snes, ya que las melodìas eran adaptaciones de las originales, mientras que los 16 bits de Nintendo contò con otras composiciones en algunos niveles).
Gracias a este post Sr Data, me ha venido como anillo al dedo, pues estaba buscando una selección (para un podcast especial sobre melodias viciosas que estamos haciendo en ANACROGAMES)aquellos queridos y más recordados juegos de antaño.
Un abrazo.
Yo la versión de Mega Drive nunca la jugué, el acceso a esta consola en Colombia era realmente muy difícil, sin duda estas tierras eran territorio de la SNES, espero jugar la versión de Mega Drive a si sea con un emulador para ver qué tal, se que tiene diferencias con la versión del SNES, incluso algunas partes que están censuradas como las chicas ligeras de ropa
Quedo atento para la edición de melodías viciosas de Anacrogames
Un abrazo amigo del espacio exterior
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